Uno de los problemas que más preocupan, en cuanto al rostro nos referimos, son las ojeras y las bolsas de los ojos. Unas ojeras muy marcadas acompañadas de bolsas en el párpado inferior dan un aspecto triste y cansado a nuestra mirada y a nuestro rostro en general. La blefaroplastia inferior puede ayudar a resolver estos problemas estéticos y devolver la vitalidad al rostro. Pero los pacientes que presentan solamente un surco de la ojera muy pronunciado, sin bolsas y sin laxitud del párpado, no suelen ser buenos candidatos a la blefaroplastia inferior. En cambio, pueden beneficiarse de tratamientos no quirúrgicos que buscan aportar volumen al párpado inferior para eliminar dichos surcos.
La blefaroplastia inferior es la cirugía que busca la mejora estética del párpado inferior eliminando las bolsas de los párpados. En algunos casos, también puede mejorar los surcos de las ojeras pero si el problema principal es éste, el Dr. Nieto le aconsejará, por ejemplo, recurrir al ácido hialurónico. Se trata de un componente natural de los tejidos que, mediante inyecciones, restituye el volumen facial y disminuye las arrugas profundas. La blefaroplastia inferior se debe realizar después de estudiar la problemática de cada paciente y debe ser una cirugía muy individualizada.
La blefaroplastia inferior es la cirugía ideal para eliminar las bolsas grasas de los ojos. Dependiendo de las características del paciente, se extrae la grasa sobrante o bien se redistribuye la grasa existente sin eliminarla, con el fin de mejorar los surcos y evitar el aspecto hundido del párpado. La experiencia ha demostrado que la extracción grasa no es recomendable para todos los pacientes por los riesgos antes mencionados. La recolocación de la grasa consigue una desaparición notable de las bolsas y de los surcos, sin crear un déficit de volumen en el párpado.