Uno de los miedos de los pacientes que sopesan someterse a una intervención de párpados es si cambiará la forma de sus ojos. Sin duda es una de las cuestiones que más frecuentemente me plantean los pacientes en mi consulta. Frecuente mente asociamos cirugía estética (en este caso de párpados) a los famosos, a la televisión, a estrellas de cine, a caras estiradas con cara de sorpresa, o inexpresivas. No dudo que existan casos de este tipo, pero no debemos asociar directamente cirugía estética con resultados estrambóticos o con gente que busca resultados extremos y que los cirujanos estéticos no debemos aceptar. Es totalmente lícito querer mejorar el aspecto de nuestros ojos cuando estos presentan signos de envejecimiento. También con frecuencia , algunos pacientes me comentan que se sienten jóvenes y activos, pero que sus ojos no transmiten esa vitalidad que antes tenían, y que a menudo les preguntan si se encuentran bien, o sin han dormido bien, ya que tienen aspecto de cansados. La mirada es una parte tan importante de nuestra expresión, que eliminar unas bolsas palpebrales marcadas puede producir un cambio muy importante en la expresión de una persona. No me malinterpretéis, con “muy importante” no quiero decir diferente, me refiero a tener mejor aspecto, mejor cara, de descansado, de más salud. La idea de la cirugía no es que al paciente le pregunten “¿qué te has hecho?”, si no que le digan que tiene mejor aspecto sin saber qué ha pasado. Obviamente existen casos particulares que al tener tanta bolsa o los párpados tan descolgados, es fácil adivinar que se ha operado de párpados, pero incluso en esos casos el cambio debe ser natural. A mi modo de verlo, una cirugía de párpados bien hecha sólo puede tener un resultado natural. Si no es así, probablemente se ha hecho algo mal o se ha hecho algo que ese paciente no necesitaba. Por lo tanto en el éxito de la cirugía no debería ser una cuestión de gustos, de que el gusto del cirujano cuadre con el del paciente. Una cirugía de párpados bien realizada no puede nunca “no gustar”, porque siempre será natural y corresponderá al aspecto que tenía el paciente hace años. Dicho esto, siempre explico también al paciente que entiendo sus miedos. Más que miedo quizás es respeto lo que debemos tener ante cualquier cirugía. No se puede menospreciar un acto quirúrgico y debemos entender en qué consiste, qué resultados debo esperar y qué complicaciones puedo tener. El cirujano no debe presionar al paciente para operarse, sino que debe facilitarle toda la información posible de una forma entendible, y es el paciente el que debe tomar la decisión. La blefaroplastia es una cirugía que, estando bien hecha, es casi imposible tener complicaciones. Una cirugía mal hecha puede tener consecuencias nefastas y de difícil solución.
Transposición de grasa en la blefaroplastia inferior
La cirugía estética de párpado inferior, conocida como blefaroplastia inferior, suele tener el objetivo de eliminar las antiestéticas bolsas de grasa de debajo los ojos
Un comentario
Hola soy de México y me dicen que en España hay excelentes médicos.
A mi me realizaron una blefaroplastia en párpado inferior espantosa. Quisiera saber si se puede hacer algo para arreglar mis ojos