La enfermedad de blefaroespasmo también llamada blefaroespasmo ocular es una contracción espasmódica involuntaria que se produce de manera repetitiva en el músculo orbicular, que se encuentra alrededor del ojo, y que provoca movimientos y gestos anormales, también conocidos como distonías. Podemos decir que consiste en un cierre involuntario de los párpados, o en un aumento ocasional del parpadeo de uno o ambos ojos. También conocido como blefaroespasmo primario o esencial, puede provocar, asimismo, otros espasmos en la cabeza, la boca o el cuello, que tan sólo desaparecen cuando la persona que lo sufre está durmiendo. Esta dolencia suele ser más frecuente en mujeres a partir de los 50 años que en el resto de la población. Y, aunque no existen pruebas de que se trate de algo hereditario, diversos factores apuntan a que en algunas familias podría existir cierta predisposición genética a sufrirlo.
Causas del blefaroespasmo
En general, se debe al mal funcionamiento de las neuronas del sistema nervioso central, en lo que están involucrados el quinto y el séptimo nervio craneal. Esto puede ser causado por una alteración neurológica funcional en el sistema nervioso central, falta de lubricación de la superficie ocular o, también, efectos secundarios de algunos medicamentos. También se dice que el estrés, la fatiga y un exceso de cafeína nos pueden llevar a sufrirlo.
Blefaroespasmo síntomas
Estos son los síntomas del blefaroespasmo benigno esencia:
- Aumento del parpadeo ocasional de uno o de ambos ojos.
- Dificultad para mantener los ojos abiertos.
- En casos graves, disminución de la visión.
- Sensibilidad a la luz.
Consecuencias
En caso de ignorar los síntomas y permitir que continúen sin visitar a un profesional, los espasmos podrían aumentar su frecuencia y duración hasta el punto en el que la persona que los sufre adquiera una ceguera funcional. Además, los espasmos faciales pueden llegar a ser tan intensos que dificultarían actividades como hablar y comer.
Soluciones para el blefaroespasmo
Blefaroespasmo tratamiento
En la actualidad, el tratamiento del blefaroespasmo por el que más apuestan los profesionales son las inyecciones de toxina botulínica. Se introducen en los músculos de alrededor de los ojos; principalmente, en el músculo orbicular y los músculos corrugadores. Esto hace que los músculos se debiliten temporalmente, de manera que disminuye la frecuencia y la intensidad de los espasmos.
En caso de que este tratamiento no resulte efectivo, se procederá a la miectomía. Consiste en extirpar de manera parcial o total los músculos que se encargan de cerrar los ojos; en especial, el músculo orbicular. Después de la cirugía, es posible que haya que continuar con la inyección de toxina botulínica una temporada. En definitiva: el blefaroespasmo benigno no es algo grave de entrada, pero no debemos dejarlo pasar si queremos evitar que llegue a ser un tema por el que preocuparnos seriamente.
Blefaroespasmo en niños
Los niños que presenten un parpadeo excesivo deberán acudir a un especialista y ser sometidos a un examen ocular completo para descartar cualquier tipo de anomalía. En caso de que el problema persista deberá ser sometido a otra nueva evaluación por parte del médico. Según nuestra experiencia, los problemas de parpadeo excesivo o enfermedad de blefaroespasmo, raramente son producto de patologías neurológicas y suelen resolverse espontáneamente.